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HOTEL RADISSON, PETRA, LA DEHESA

Pura gracia y buen gusto.


Este año el diario estadounidense The New York Times eligió Santiago como el destino turístico número uno por conocer durante el 2011, y en una lista de 41 lugares que incluían paradisiacas islas en Estados Unidos, México y Tailandia. ¿Por qué? Porque principalmente “la ciudad abraza la cultura moderna”.
Hay varias cosas que están a la altura de las capitales más importantes del mundo, que logran sorprender hasta a los extranjeros más viajados, y ya no se trata solo de la artesanía ni de la Cordillera de los Andes, sino que del diseño y la decoración también.
Si ya conociste el nuevo hotel Radisson Petra en la Dehesa sabrás de lo que se está hablando. No dice demasiado por fuera pero al entrar transporta a otro universo. El look es europeo, sofisticado, hecho con materiales simples, lo que lo hace ser un hotel de cinco estrellas pero más accesible. Pura gracia y buen gusto.
Las oficinas de arquitectura de Harken Jensen y Rubén Díaz, profesor de nuestra escuela; estuvieron a cargo de este proyecto y desarrollaron acorde a los requisitos de sus dueños: “líneas planas, simples, tipo mediterráneo sin grandes adornos y sin invadir el espacio exterior”. Así fue como construyeron este edificio que contempla un gran lobby, 105 habitaciones, spa, gimnasio, dos piscinas, terrazas, restorán y 5 salones de eventos. Son 13 mil metros cuadrados construidos en seis pisos.
FICHA TÉCNICA
UBICACIÓN: COMANDANTE MALBEC N° 12851, LO BARNECHEA
MANDANTE: INVERSIONES MONTEMAYOR S.A.
ARQUITECTOS: HARKEN JENSEN VIVANCO – RUBÉN DÍAZ MUNIZAGA
DECORACIÓN: ENRIQUE CONCHA,  arquitecto  a cargo GERMAN MARGOZZINI
PROYECTO DE ILUMINACIÓN: MÓNICA PÉREZ
CALCULISTA: JOSÉ GAJARDO GONZÁLEZ
CONSTRUCTORA: BASALTO
ITO: JUAN EDUARDO MUJICA
MEMORIA
El proyecto nace por un encargo que hace la inmobiliaria al grupo de arquitectos, como el desafío  de construir el primer hotel, de gran envergadura en la comuna de Lo Barnechea. Dentro de las premisas de diseño se manejaron las variables de la solidez y lo pétreo, ya que el proyecto se emplaza muy próximo al Cordillera de Los Andes. El partido general nace de un cubo de hormigón armado, que se rompe y deja ver el espacio central de 8 niveles de altura, que recorre y relaciona espacialmente todo el proyecto, además en su frontis se incorpora una malla de aluminio, que protege y además proporciona  distintos escenarios durante el día, debido al trabajo de la luz natural y artificial que la ocupa como telón.
Dentro de la materialidad del proyecto predomina,  el hormigón armado a la vista, el que se complementa con muros cortinas de cristal y ventanas termopanel en folio madera. En los pavimentos predominan los porcelanatos pétreos de gran formato.